Carballeira anota en la abultada victoria de España (4-7)

España, tras sus dos empates con Francia y Portugal, no se jugaba mucho en el encuentro contra Italia, puesto que sólo podía quedar segunda o tercera. En el primer caso, se mediría a Alemania y en el segundo a Andorra.

Aún así, Guillem Cabestany, que reservó a Martí Casas y volvió a meter a César Carballeira de titular, quiso que su equipo saliese mandando en la pista. Pero, sus jugadores no parecían cómodos y rápidamente se vieron sorprendidos por los italianos.
Ellos se adelantarían en el marcador a los tres minutos tras un potente disparo lejano de Andrea Malagoli que golpeó en Francesco Compagno para acabar entrando.

Sin embargo, esto no afectaría a los españoles, que poco después empataban gracias a un asistencia de Pau Bargalló para que Nil Roca empujase la bola a la meta rival.

Apenas sin tiempo para celebrar, España conseguiría un penalti que sería lanzado y transformado por César, con un gran lanzamiento.

E igual que pasó antes, apenas sacó Italia de centro cuando Marc Julià robó la bola y encaró la portería para marcar el tercer tanto del encuentro.

Tras esto, el partido bajó de ritmo pero aún así, antes del descanso España marcaría otro tanto, obra de Marc Grau.
A la vuelta de los vestuarios, el partido volvió con poco ritmo. Aún así habría dos goles casi seguidos, uno de Italia y otro de España, para mantener primero y luego para incrementar.

Los italianos, buscaron reducirla y lo lograrían pero poco les duraría ya que se volverían a encontrar con un gol en contra. Al cuál replicarían con una falta directa para cerrar el partido con el 4-7 final.